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Las pulgas y las mascotas a menudo coexisten. El pequeño insecto negro bebe sangre y en el proceso puede causar enfermedades, transmitir enfermedades, molestar a su gato o perro y afectar a las familias.
Es muy importante actuar con rapidez para solucionar el problema. La vida útil de una pulga es de un mes o más, por lo que si llega tarde, surgirá una nueva generación de plagas.
Primero identifique un problema de pulgas. Si tu gato o perro se rasca con frecuencia, es posible que se deba a las pulgas. Las pulgas suelen saltar, así que puedes verlas si pones un trapo donde están esperando. Pueden volverse visibles a medida que se mueven (una tela ligera funciona mejor para mostrar insectos pequeños y oscuros).
Estos insectos tienen cuatro partes de su vida llamadas huevo, gusano o larva, pupa y adulto. Los huevos (sangre) son puestos por la hembra después de la comida. Las larvas y las pupas son etapas preadultas cuando el insecto está listo para atacar, morder, comer y poner más huevos para comenzar de nuevo.
También es posible que deba verificar los lugares al aire libre que visita su mascota, o cualquier otro animal con el que su perro o gato pueda entrar en contacto, porque el gato o el perro ha recogido los insectos en alguna parte. Incluso un solo lugar o insecto puede transmitirlo a todos, por lo que es muy importante estar atento.
Es muy importante actuar con rapidez deteniendo el ciclo de vida del insecto. Durante la etapa de huevo, simplemente peinar el pelo del perro o gato con un peine de dientes finos puede ayudar a eliminar los huevos. Sin embargo, los huevos pueden caer sobre las superficies, por lo que debe tener cuidado de aspirar a fondo cualquier área que haya visitado el gato o el perro.
Si ya tiene pulgas, debería considerar destruir la ropa de cama de su mascota. Además, si bien la limpieza profunda puede resolver el problema, es posible que desee limpiar muebles y alfombras con vapor para deshacerse de las pulgas y los huevos restantes.
¡La mayor condición es que nunca haya pulgas! La prevención es la mejor opción, y puedes hacerlo llamando antes de que los problemas se agraven. Recuerda estos consejos y mejorarás la salud de tu gato o perro y la tuya ¡y no tendrás un intruso!
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